domingo, 31 de enero de 2010

Pretender

Nunca me gustó la mentira, siempre lo creí algo de lo peor, pero últimamente ésta ha sido, sin que del todo sea mi voluntad, mi refugio, he fingido tanto que no sé distinguir mis sentimientos reales de los fingidos, y es todo muy tonto, no me parece algo que nadie merezca, ser engañado es algo indignante.

Alguien me enseño una vez que el tiempo lo sana todo y lo he creído sin más, aunque cuando no se tiene paciencia te sientes morir. Es tan difícil para mi soportar un dolor tan fuerte como este que casi creo que moriré en el intento, él me hirió tanto y todo fue porque descubrió el engaño, no es algo que no tenga motivos, ya que el motivo soy yo y mi forma de actuar.

La vida se volvió para mí una colina tan inclinada y difícil de transitar que me siento resbalar.

No es fácil superar la soledad, y tengo miedo de no encontrar nunca más alguien que me ame como una vez me amó él a mi.

Temo por mi y por mi cordura, temo a la depresión, a la soledad y al aislamiento. Ahora, que no paro de llorar quiero que alguien llegue y me pueda consolar, todo lo que necesito es un abrazo, no lo veo a él más, Diego era todo mi mundo y me dejó porque lo herí yo primero, él simplemente reaccionó en su defensa, no lo quiero culpar, en absoluto.

1 comentario:

  1. Bueno, bien dicen que de los errores se aprende y creo que eso ya lo tienes claro. Lo único que puedo decirte esque si enserio te sigue gustando ese chico, luches por él! y cambies tu actitud... hasle ver que aún le importas, de lo contrario siempre te lamentarás. Te deseo suerte en la desición que tomes y recuerda que en mi tienes a una amiga :)

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